Tipos de líquidos penetrantes
Gracias a lo que se denomina como ensayo de líquidos penetrantes se logran detectar defectos de rotura en la superficie de los materiales.
Se trata de uno de los métodos de ensayos no destructivos que son más empleados en el área industrial y, a su vez, que resultan más rentables. Pero, ¿qué tipos de líquidos penetrantes nos podemos encontrar?
Líquidos penetrantes: clasificación
Los beneficios de realizar ensayos no destructivos con líquidos penetrantes son numerosos:
- Resulta un proceso sencillo de llevar a cabo, y los resultados son inmediatos.
- Las dimensiones de la pieza a inspeccionar es indiferente, ya que este proceso se puede aplicar y adaptar a cualquier tamaño.
- Las pruebas no se limitan a metales ferromagnéticos, al contrario que aquellas que son realizadas por partículas magnéticas.
A la hora de establecer los tipos de líquidos penetrantes podemos utilizar estas dos clasificaciones.
Color
En este caso, contamos con dos tipos de líquidos penetrantes.
- Líquidos penetrantes visibles: son aquellos visibles a la luz natural, y que se caracterizan por tener menos sensibilidad.
- Líquidos penetrantes fluorescentes: son aquellos líquidos más sensibles y difíciles de ser detectados a simple vista. De hecho, para su inspección se necesita una lámpara de luz ultravioleta.
Método de remoción de exceso de penetrante
En este caso podemos encontrarnos con tres tipos de líquidos penetrantes.
- Lavables con agua o autoemulsificantes: destacan por ser muy económicos y porque para su eliminación simplemente se necesita agua.
- Postemulsificables: para eliminar este tipo de líquidos no basta con agua, sino que demandan de un emulsificador, que crea una capa superficial que posteriormente sí que es eliminada con agua.
Podemos encontrarnos con dos clases de emulsificadores:
- Hidrofílicos, que se diluyen con agua siguiendo las recomendaciones del fabricante. Funcionan como detergente y se pueden aplicar sobre las piezas por pulverización, método éste por el que el paso del lavado se omite, y más tarde se enjuaga la pieza para finalizar la limpieza.
- Lipofílicos, que contienen agentes emulsionantes a base de petróleo y presentan capacidad de tolerar hasta un 5% de agua en su constitución.
A su vez, los emulsificadores lipofílicos se dividen entre aquellos de alta viscosidad (empleados para detectar defectos abiertos y poco profundos), los de baja viscosidad (utilizados para detectar defectos finos) y los de baja viscosidad sin azufre (que cuentan con las mismas consideraciones que los de baja viscosidad, salvo por el hecho de que no tienen azufre).
- Removibles con solvente: se trata de líquidos que no son solubles en agua. Por ello, para su eliminación se emplea un disolvente especial y no acuoso, que suele presentarse como aerosol.
En Geinsa esbozamos las líneas automáticas para la comprobación visual de posibles fallos mediante líquidos penetrantes y polvo revelador.
Del mismo modo, diseñamos las líneas de líquidos penetrantes para un funcionamiento automatizado. La comprobación visual se lleva a cabo en un recinto negro opaco con la incorporación de luces ultravioleta, las cuales muestran las zonas con fallos en las que, por capilaridad, el líquido revelador queda adherido.
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